miércoles, 28 de enero de 2015

The Cuban Moment


Hoy participé en el evento "The Cuban Moment" para discutir el tema de las actuales relaciones entre los Estados Unidos y Cuba. Toda la discusión se condujo en inglés así que contra mi costumbre pondré el texto que leí tal cual. 

I must confess that when I read the news about the normalization of relations between United States and Cuba it reminded me of an episode from the Simpsons. The one in which Mr. Burns and Homer escape to Cuba with a trillion dollar note just about the same time Fidel Castro finds out that his regime is on the verge of bankruptcy and he has to resign. When Mr. Burns and Homer are brought to Castro’s presence the Comandante asks them to let him see the note. Although Mr. Burns has doubts, Homer encourages him saying “Mr. Burns, I think we can trust the president of Cuba”. Of course, Castro doesn’t give back the bill, and in the next scene Mr. Burns and Homer are crossing the Florida Strait in a raft. It seemed to me that on December 17th, the president of the United States was playing Homer Simpson’s part.This is not because I’m a supporter of the embargo because I am not. I just think that in taking this bold step, Mr. Obama has been as naïve as Homer Simpson. When he outlined his position, Obama seemed confident that the normalization of relations with Cuba and the free circulation of American tourists would do what half a century of a more aggressive approach failed to produce. Many people think that Obama gave too much for almost nothing: a diplomatic victory and three healthy spies for to a poor guy with some teeth missing. He has shown too much confidence in the good will of Cuba’s leadership and in America’s influence on Cuba’s society. Obama seems to ignore that Cuba is neither as isolated nor under so much ideological control as 30 years ago. He might not be aware either that Raul Castro’s pragmatism points to the switch from a socialist to a capitalist dictatorship. While Obama sees the normalization of Cuba-US relations as a radically new event, for the Cuban government it is only the next lifesaver that will allow them to survive for five or ten more years, just as the European investments of the 90s did, or the Venezuelan oil of the last 15 years.One of the reasons Castro’s regime is the longest dictatorship in the Western Hemisphere is that it has adapted to every single challenge of the last 56 years, changing many things except its stance against anything that endangers its almost absolute control over Cubans.Let’s take into account that human rights violations in Cuba are not just a problematic issue, but part of a system of oppression that prevents its people from supporting themselves economically or conducting normal relationships with the rest of the world. So, in Cuba’s case, the human rights issues transcend the ethical dimension; they are part and parcel of everyday reality.   If we play the cynical card, we would say, “If we have relations with Saudi Arabia why not with Cuba?” But let’s be really cynical, and remember that Saudi Arabia has oil and Cuba doesn’t. What’s more, Cuba is a country that rarely pays for anything. Ask Russia, ask Venezuela, ask Mexico, ask Spain. Unconditional relations with Cuba could be bad for the American conscience but worst for its pocket.   We must also remember that this normalization occurs in a context of dangerous tendencies toward autocracy in Latin America, and right now the Cuban regime represents the worst of Latin American traditions in terms of violence and autocracy. The Cuban example is perverse and contagious, and if the US government thinks that good relations with Raul Castro could improve its relationship with the rest of the continent, it should think twice before  changing its position regarding Cuba’s membership in the Organization of American States.To conclude: I don’t believe in the magical powers of the free market or of American tourism. I think that this normalization process should be accompanied by conditions. Other way, the American karma would be at risk one more, and unforgettable, time. The condition I’m thinking of is as simple as the legalization of the Cuban opposition. The Cuban government’s will to deal with its citizens in a civilized way, or its refusal to do so,  should give us a good idea of how they are going to treat American interests in the future.    
Bueno, eso fue todo lo que dije en toda la noche hasta que la moderadora amablemente me preguntó qué pensaba del asunto y tuve que disculparme por haber sido la única persona que esa tarde se había referido al tema de los derechos humanos que evidentemente no le interesaba a nadie más que a mí. Luego expliqué por qué todavía me interesaba el tema pero supongo que a los lectores de este blog no necesite repetírselo.

P.D.:
Ya me iba del salón donde se celebró el evento cuando una señora me abordó:

-¿Tú eres Enrique?


-Sí. –respondo, resignado ante esa irremediable realidad.

-Por eso es que ustedes siempre les pasa lo mismo. Por confiar en los americanos-me dice.

-¿Quiénes son “ustedes”? –le pregunto a mi vez.

-Los cubanos.

-¿Pero usted no es cubana? – le pregunto basándome en su acento bastante obvio.

-Sí pero yo nunca he dicho esas cosas –me dice y me pregunto si “esas cosas” a las que ella alude será el tema de los derechos humanos en Cuba en general o simplemente su dependencia de los Estados Unidos en particular- No hay que esperar nada de ellos.

-Pero es Obama el que ha hablado de derechos humanos.

-Sólo son palabras.

 -Sí, pero palabras es lo único que hay ahora mismo y a ellas me atengo. Nosotros los bobos no tenemos más que palabras y a ellas nos aferramos. –y a partir de ahí no queda mucho que decir y nos despedimos.



10 comentarios:

luvicallejas dijo...

Yo dudo que Obama sea tan inocente como lo pintas, más allá de sus palabras--que como toda retórica política, hay que tomar con pinzas y no pensarlas como una expresión real de sus creencias--es parte de un juego político, con esa movida puso a los republicanos a la defensiva y se ubicó en el mainstream como una figura de avanzada. Recuerda que este es el mismo tipo que lanza "drones" a diestra y siniestra para asesinar a sus "secuaces", incluyendo sus familias.

Unknown dijo...

es de consecuente que con tan beatiful panel se requiera un sorry por los rights de los kubiches a pata

Enrisco dijo...

Luvi: venia a añadir una postdata y me encuentro tu comentario. Te transcribo aquí esa postdata como respuesta a lo que me preguntas añdiendo solo que muy jodidos debemos estar cuando Obama para disfrazarse como figura de avanzada restablece relaciones con la dictadura mas larga del hemisferio.

Ya me iba del salón donde se celebró el evento cuando una señora me abordó:
-¿Tú eres Enrique?

-Sí. –respondo ante esa irremediable realidad.

-Por eso es que ustedes siempre les pasa lo mismo. Por confiar en los americanos-me dice.

-¿Quiénes son “ustedes”? –le pregunto a mi vez.

-Los cubanos.

-¿Pero usted no es cubana? – le pregunto basándome en su acento bastante obvio.

-Sí pero yo nunca he dicho esas cosas –me dice y me pregunto si “esas cosas” a las que ella alude será el tema de los derechos humanos en Cuba en general o simplemente su dependencia de los Estados Unidos en particular- No hay que esperar nada de ellos.

-Pero es Obama el que ha hablado de derechos humanos.

-Sólo son palabras.

-Sí, pero palabras es lo único que hay ahora mismo y a ellas me atengo. Nosotros los bobos no tenemos más que palabras y a ellas nos aferramos. –y a partir de ahí no nos queda mucho que decir.

Anónimo dijo...

Con todo el repeto indebido, conozco personalmente a unos cuantos miembros y miembras de ese panel y a la mayoría le interesan los derechos humanos lo mismo que a mí la cuadratura del círculo. Veo mucho/a oportunista que de pronto se encuentra relevante/invitado/escuchado/pagado/entrevistado/vuelto a invitar por su dedicación al cubichismo, afilándose los dientes como capitalistas simbólicos cuyo único capital, la muela, ha multiplicado su return of investment de la noche a la mañana, sólo porque por allá arriba se intercambiaron otras muelas sin consecuencias. Y los que pagan la plusvalía simbólica son los de opositores, como siempre. ¿A cuánto está el tonfazo por el lomo esta semana en la ínsula? Más barato que nunca. Menos mal que les pusiste la podría, aunque se habrán hecho los intelectuales, como siempre.

Realpolitik dijo...

Obama buscaba una versión de Nixon/China para adornar su bastante impresentable "legado." Este asunto no tiene NADA que ver con los cubanos (salvo la casta castrista, por supuesto), que resultan simplemente objetos a mano. En resumen de cuentas, el mundo no trata el asunto de Cuba seriamente pues no lo toma en serio--y Obama no toma prácticamente nada en serio salvo su egregia persona. El caso de Cuba se reduce a romanticismo trasnochado, folclor revolucionario y anti-americanismo. Y efectivamente, los cubanos estamos MUY jodidos.

Realpolitik dijo...

Eso de "intelectuales," no solamente en este caso sino en general, hace mucho rato que se ha convertido en una broma de mal gusto, por no decir amarga. No se trata ni siquiera de que si son verdaderamente inteligentes o no--se puede ser inteligente, hasta brillante, y ser todo un miserable hijo de puta. De todos modos, la inteligencia es una cosa, y lo que se llama "wisdom" en inglés es otra.

Miguel Iturralde dijo...

Pobre Cuba -¿o es México?- tan lejos de Dios y tan cerca de Estados Unidos.

Obama le allanó el campo a los estados mayoritariamente republicanos, que son los que van dar el tumbe vendiendo productos agrícolas a Cuba. Todo el pollo congelado de tercera categoría producido en el sur de EE.UU y no apto para las góndolas de los supermercados estadounidenses terminará en las mesas cubanas.

Aquí no hay ninguna consideración por los derechos humanos. EE.UU vela por sus intereses y punto. Ahí está Arabia Saudí, un país notorio por su falta de respeto a los derechos hunanos y nada impide que los norteamericanos los defiendan a cambio de petróleo a buen precio. No pequemos de ingenuos.

Más de 50 años pataleando porque los norteamericanos no nos resuelven el problema, amparados en leyes de ajuste y de pies secos y mojados, y en Venezuela los venezolanos, algunos por lo menos, cogiendo perdigonazos por exigir sus derechos humanos.

Otra cosa que me llama la atención es que se considere a Richard Nixon un hombre de estado grandioso cuando su vice-presidente, Spiro Agnew, tuvo que renunciar al cargo por aceptar sobornos mientras fue funcionario de la ciudad de Baltimore, como gobernador de Maryland y también ocupando la vice-presidencia. Y el propio Nixon renunció por un escándalo político en el cual, ¡qué feliz coincidencia!, tenían un rol protagónico un grupo de exiliados cubanos, operadores on-and-off de la CIA y del régimen castrista (uno de ellos).

Obama no pasará a la historia como como un gran presidente -calificación de B- y cuidado- pero enderezó un poco la situación económica, buscó una alternativa para un plan de salud universal, encontró y cepilló a Bin-Laden, y en el tema que nos ocupa, Cubita la Bella, tuvo la valentía, para bien o para mal, de hacer algo diferente.

Pienso que habrán cambios hacia lo positivo con el intercambio de norteamericanos de a pie y los cubanos. El respeto a los derechos humanos comenzará cuando los cubanos como sociedad civil lo exijan al régimen y no por la carambola gobierno norteamericano-régimen castrista.

Saludos

Enrisco dijo...

Miguel, hacer pactos con mafiosos mala paga nunca ha sido conveniente para ningun gobierno, sobre todo si se va de mansa paloma pensando que porque los trates bien te van a devolver el gesto. ahi tienes a Raul pidiendo todo lo que se le ocurre pensando "si me dieron tres espias por un viejito sin dientes a lo mejor todo lo demas me lo dan gratis". y Obama si menciono el tema de los derechos humanos asi que hay que cogerle la palabra y no jugar al cinismo porque para eso no tenemos.

Anónimo dijo...

Agitator de equine fue el unicorn trabajar q tube el Marxistica presidente. CREANME. Q SI OBAMA PODRIA ANUNCIAR ALGUNA LOGRON ALGUNA DIA SERIA TIRALE LA CERCA CON SALVAVIDAS A LA BANCARROTA DE LOS CASTROS JUNTO CONEL NYT....LLEVAN 50+ ABRILES PREGONANDO AQUI EN EU LO BUENA Q ESTANCIA LA COSA EN CUBA Y COMO EU DEBERIA SE SER IGUAL Y VAN HA DEJAR Q LA CARROZA SE CONVIERTA EN UNA CALABAZA A LA MEDIA NOCHE?

luvicallejas dijo...

Enrique,

Contestando a la postdata y tu respuesta:

1) Nunca me atrevería, como la señora que mencionas, a colocar a "ustedes" los cubanos en el mismo saco. Pero sí resulta curiosa cierta fe en EEUU, es una fe que tiene una historia larguísma, pienso en la fe de los anexionistas que a mediados del siglo XIX miraban al sur estadounidense como panacea y posible modelo, en la fe de los que enaltecían a Lincoln, olvidando que nunca fue abolicionista y que elimina la esclavitud como parte de una política necesariamente pragmática para establecer la paz en el país, en la fe de los que celebraron la invasión estadounidense para luego darse cuenta que los gringos no traían las virtudes de la democracia republicana al patio. No quiero sugerir que tú compartes esta fe, pero tu representación de Obama como un Homero Simpson me parece errónea, al tomar en cuenta no solo su administración, sino la historia de relaciones entre EEUU y Cuba.